Consumir cítricos en invierno es un seguro para nuestra salud, aportan un extra de vitaminas y minerales que nos previenen de resfriados y enfermedades comunes de esta temporada, y son un alimento riquísimo y siempre apetecible, por su frescura, su sabor chispeante, su dulzura y su aroma. Podemos consumirlo de múltiples formas y existen recetarios con los cítricos, -naranjas, mandarinas, limones y pomelos- como únicos protagonistas en cremas, tartas, pasteles, ensaladas, guarniciones, zumos, cócteles, y un largo etcétera.
Pero no solo las naranjas, el consumo diario de frutas variadas nos aporta esas vitaminas tan necesarias, y hará que nuestro sistema inmunológico se blinde ante posibles ataques, sin necesidad de tomar medicamentos.
El consumo de frutas diariamente aporta hidratación al organismo, fibra y antioxidantes, aceites esenciales y como la vitamina C es un factor importante en la producción de colágeno, nuestra piel también lo agradecerá, tendrá una luz especial que le dará aspecto joven sea cual sea la edad. La fibra de las frutas -y los cítricos tienen mucha- evita la retención de líquidos y ayuda a la mejor función intestinal.
La naranja, protagonista de la dieta en invierno
El consumo de naranjas en invierno aporta al organismo una gran cantidad de vitamina C, calcio, hierro, potasio y sodio, principalmente. Estos elementos producen vitalidad, energía, elasticidad muscular –lo que previene de calambres y roturas musculares- y como consecuencia, todo esto se traduce en belleza y brillo en la expresión de quien consume regularmente este exquisito fruto.
Es una buenísima recomendación, para todo el mundo pero en especial para los niños, que están creciendo y son un torbellino que consume energía todo el día, en forma de zumos y como postre diario, y también para los mayores, pues su necesidad de hidratación y de un sistema inmunológico fuerte, lo hacen muy recomendable.
En resumen, los beneficios de los cítricos serían:
-Mejoran la función intestinal por la fibra y el agua que contienen.
-En personas mayores, ayudan a prevenir el desarrollo y la manifestación de enfermedades degenerativas.
-Fortalecen el sistema inmunológico, pues están compuestos de vitaminas A,C, B1 y B2. Alejamos gripes, catarros, infecciones comunes y resfriados.
-La vitamina C y el ácido fólico que contienen también mejoran la función sexual.
-Sus antioxidantes y aceites esenciales son un complemento de belleza perfecto.
Los alimentos naturales como las naranjas, limones, pomelos, mandarinas, y también los orgánicos, son los más recomendados puesto que están exentos en su composición de químicos u hormonas de la industria alimentaria, su estructura permanece inalterable, por lo que su consumo es seguro y no produce ninguna alteración a nivel celular.
Entre los cítricos, la naranja es la favorita, por su exquisito sabor y su gran aporte de vitamina C. Tomar una sola naranja al día produce todo el aporte necesario de esta vitamina para un día, en situaciones normales.
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Después de décadas de cultivar cítricos de la mejor calidad, decidieron llegar directamente al consumidor final, aprovechando los canales digitales, internet, y los nuevos hábitos de compra de los consumidores más jóvenes. Ha resultado todo un éxito, ya que los frutos llegan diariamente desde el campo, no necesitan tratamientos ni depósito en cámaras de frío, y por supuesto con todos los controles de calidad y sanitarios exigidos por la normativa de la Unión Europea. Degustarás las genuinas mandarinas y naranjas de Valencia con todo su sabor, como si acabaras de recogerlas del árbol.
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