Antes de nada hay que reconocer las cosas. En España tenemos los mejores profesionales sanitarios del mundo. Es algo que se ha confirmado durante los peores días de la pandemia. Grandes profesionales que se han jugado la vida para salvar la de los demás. Personas que se han sacrificado durante muchas horas para poder sacarnos de esta maldita pandemia. Eso hay que dejar claro. Ellos están por encima de un sistema sanitario que hace aguas, y de unos políticos que ni en la peor situación de la historia de España, han podido llegar a un acuerdo. Y una vez dicho esto, vamos al tema.
Y es que, dice el refrán que hasta “el mejor escribano comete un borrón”, y esto es lo que ocurre en ocasiones con los sanitarios en este país. Son muchas horas de trabajo, muchas operaciones, en ocasiones sobresaturación de los quirófanos…y es aquí cuando llegan las negligencias médicas. Sería de cínicos decir que no existen, porque lamentablemente hay muchas. Y ahora se hacen más públicas gracias a los medios de comunicación y a las redes sociales. Pues bien, lo primero que queremos decir que una negligencia médica puede llegar, pero es cierto que es en ocasiones puntuales, como por ejemplo la que ocurrió hace unos meses en Zamora. Pero llegado este momento, ¿cómo actúo?
Qué hacer
Como ya hemos dicho, por suerte, los casos de negligencias médicas no son habituales en este país, pero es cierto que existen. Además, cuentan con una enorme complejidad, ya que hay que entender y hacer comprender al juez los términos médicos. Son casos que requieren de un conocimiento previo y de una preparación específica. Por eso, ante esto lo mejor es ponernos en manos de abogados. En el caso de Bufete Albanés, abogados especialistas en negligencias médicas en Madrid, nos aseguran que tienes que ir a unos abogados que traten de toda clase de asuntos en materia de responsabilidad civil profesional relacionados con la generación de daños a terceros, especialmente en los ámbitos jurídico, sanitario, técnico y financiero. Es decir, en todos aquellos que atañen a reclamaciones por responsabilidad civil de las profesiones jurídicas, responsabilidad por negligencias médicas, negligencias por defectos de la construcción y negligencias de asesores fiscales.
Una vez que estamos en buenas manos, todo será más sencillo, aunque hay que advertir de que no será un camino de rosas, se vivirán momentos de desesperación, tendrás que escuchar muchas cosas que no son verdad, y si hay de por medio un fallecido, tendrás que rememorar historias pasadas duras. Por eso, hay que concienciarse que cuando se denuncia una negligencia médica hay que ser fuerte y esperar un camino lleno de piedras.
Plazos
Mucho ojo con el tiempo. Si estás dispuesto a denunciar lo tienes que hacer en tiempo y en forma. Ten en cuenta los plazos de prescripción de una negligencia médica. Aunque tu caso haya sido una clara negligencia médica, ningún profesional podrá ayudarte si se encuentra fuera de plazo. Este tipo de casos prescriben bastante rápido, así que es un punto importante a tener en cuenta. Por eso, aunque sea duro, hay que hartarse de valor y denunciar la situación ante unos abogados en cuanto nos ha ocurrido la situación.
Documentación
Otra piedra grande que nos vamos a encontrar en el camino será la de recopilar documentación. No es fácil. Además de que tu cabeza no estará al 100%, desde los centros médicos siempre nos pondrán pegas. Prepárate para escuchar un “eso no lo tenemos”, “ese informe es privado y no te lo podemos dar”, etc. En algunas ocasiones los centros se niegan a proveerla, pese a ser un derecho de paciente. En otros casos, aportan la documentación, pero incompleta. Lo que está claro es que si tenemos un abogado experto en negligencias amenaza o realiza una simple llamada.
Perito médico
En ocasiones, se requiere de la presencia de un perito, es decir, de médicos que son especialistas cuya labor es emitir un informe en el que se concluya si ha tenido lugar una negligencia médica. Y, si ha ocurrido, por qué y cómo ha sucedido. Son un punto intermedio entre la medicina y lo judicial.
Nos vamos a juicio
Aunque hay diversas maneras por las que se puede llevar una demanda por negligencia médica, la más recomendable es la vía civil. A menos de que se llegue a un acuerdo extrajudicial, lo normal es que se tenga que acudir a juicio. Luego será el momento del juicio, de la sentencia y de una posible indemnización. Pero eso ya es otra historia.
Nuestra intención solo es decir que tenemos que confiar en los profesionales de la sanidad de España, pero que siempre que tengas un problema, o creas que se ha cometido una negligencia, lo que tienes que hacer es ponerte en manos de profesionales.